• Construcciones de hace 4.600 años siguen deslumbrando

• La riqueza arqueológica está por todo el país

José Manuel Bustos C.

Editor

HOY EN POSITIVO

Quizás usted al igual que millones de personas en todo el mundo, haya desarrollado interés y curiosidad por todo lo ocurrido más de cuarenta siglos atrás en ese país ubicado en la parte noreste del continente africano, o ha llegado a disfrutar de documentales en televisión, o habrá guardado algún recorte de periódico o hasta revistas, que hagan alusión en parte, a la riqueza arqueológica egipcia, fundamentada en el poder que fue forjado por más de treinta dinastías a través de toda la historia de esta nación que es musulmana en más de un 90%.

Egipto, – hoy nación árabe con sus 110 millones de habitantes- sigue produciendo magia y misterio con sus historias de faraones que construían sus tumbas hasta en forma de pirámides, donde además se practicaba el ritual de la momificación, motivados por sus creencias de lo que sucedería después de la muerte, y ni se diga de sus escritos gracias a una planta nacida en el espectacular río Nilo conocida mundialmente como el papiro. De todo esto y más, tratará esta primera entrega de varias que les hemos preparado, todo gracias a una reciente visita realizada a esas tierras africanas.

Debo confesar que quien les escribe, desarrolló una fascinación por el Egipto antiguo desde la niñez, y motivado por ello ya en la vida adulta, nos preparamos para ir hasta allá, a disfrutar de todo aquello que se ha contado a través de los años. Y podrá coincidir, que “el parte-aguas” se gestó a partir del descubrimiento de la tumba del Rey Tut , por parte del arqueólogo inglés Howard Carter en 1922, donde se descubrieron más de 5.500 artículos pertenecientes a este joven que falleció apenas a sus 19 años.

Fue a partir de ese histórico hallazgo, que el mundo volvió los ojos hacia esa cultura, y aún en la actualidad, se siguen descubriendo lugares emblemáticos o descifrándose mensajes donde se muestran las costumbres, los distintos dioses a los que adoraban y hasta los distintos tipos de sacrificios que se realizaban, así como los motivos para hacerlos. Además de Tut, otro importante faraón que lideró grandes construcciones fue Ramsés, quien gobernó un poco más de 60 años, -vivió por más de 90 años, – y en muchos lugares de Egipto, se encuentran enormes edificaciones y muchas de ellas conservan hasta los colores utilizados en las pinturas y otras decoraciones, como si fueran hechas días atrás, pero intentemos comprender que muchos de esos lugares, fueron construidos hace 4.600 años. Sin duda que aspectos como estos, impresionan a cualquier visitante.

Esta visita a tierras egipcias nos permitió llegar a El Cairo, – provenientes de Turquía-, tomar al otro día, un nuevo vuelo pero ya interno y dirigirnos hacia el sur del país para llegar a la ciudad de Aswan, – ubicada en la frontera sur-, desde donde tomamos un crucero que transita hacia el norte por el río Nilo.

Antes de zarpar, nos dirigimos como primera visita en viaje por bote a la isla Philae, donde se encuentra el Templo en honor a la diosa Isis, construido 300 años antes de Cristo. Al siguiente día, nos dirigimos hacia el complejo arqueológico donde se encuentra el Templo KOM OMBO, el único donde convergen desde la fachada, dos edificaciones idénticas, con la llamativa práctica de adorar al dios representado por el cocodrilo. Ya habrá oportunidad de citar importantes detalles de cada lugar visitado, por ahora, solo los vamos citando para ilustrar parte de toda esta riqueza del antiguo Egipto, y se queda espacio, mencionaremos todo lo que se vive en el crucero, por esos siete días y seis noches desde Aswan hasta Luxor, ubicado de la parte central del país, pero hacia el sur.

La tercera maravilla que nos esperaba era el Templo de Edfu, realmente impresionante también, como lo fue muy cerca el complejo Karnak; en cada uno de estos lugares es característico que, en la parte final de cada edificación, se encuentra una especie de altar, lugar donde se veneraban a sus distintos dioses, y las puertas de todos estos templos, dan hacia el oeste y al ocultarse, el sol se refleja como un solo rayo de luz sobre esos altares, por el símbolo de Ra, el dios sol. Otro lugar visitado pero ya es fuera de serie es Abu Simbel, que fue removido unos pocos metros en los años 60 para construir la represa de Aswan, y donde se encuentran dos enormes edificaciones; junto a la principal, Ramsés mandó a construir otro templo en honor de su esposa Nefertari, – no confundir con Nefertiti-, quien fue la esposa de Akhenatón, -papá del Rey Tut- y madrastra a la vez de estt famoso joven. A ella por cierto, se le reconoce como la que desterró las distintas deidades antiguos, para poder convertirse ellos como pareja, en los dioses reinantes de Egipto, dinastía VIII del total de 30 que hubo en la era antigua en distintos periodos.

Ya con más recorrido a través del Nilo, se llega a la ciudad de Luxor, más ordenada y meno ruidosa que El Cairo. El propio monumento es de largo recorrido, con columnas muy altas y donde se llegaron a colocar los obeliscos más altos jamás construidos. También disfrutamos del “Valle de los Reyes”, donde se ubican importantes tumbas como las del Rey Tut. Vale citar que en la madrugada del mismo día, pudimos disfrutar del tour en globos aerostáticos y ver desde las alturas, ese mismo valle. Nos movilizamos luego hacia el Templo de una de las cuatro Faraonas que tuvo Egipto: el de Hatshepsut, desde donde “en línea recta”, se conecta con las estructuras allá del mismo Luxor.

Unos días después ya en la capital, nos esperaban las deslumbrantes pirámides ubicadas en la meseta de Giza – la más grande la de Keops, la de su hijo Kefren y el nieto del primero, Micerinos- y prácticamente muy cerca de ahí, la imponente Esfinge. Por cierto, tuvimos el privilegio de ingresar hasta la parte central de la pirámide de Keops, y estar en el salón donde reposó su cuerpo; un acceso difícil e incómodo, pero que bien vale la pena sentir esa energía ahí dentro. Posteriormente no podía faltar la visita al Museo más famoso del mundo, donde destacan sin duda, parte de esos miles de artículos que encontró Carter en la tumba de Tutankamon. Este mismo 2023, Egipto inaugurará el nuevo museo, con tecnología moderna y ubicado muy cerca de Giza, y ya están en el proceso de traslado gradual de toda esta riqueza arqueológica. En la próxima entrega, conoceremos mucho más de la vida de los egipcios, tanto de la época antigua como de la actualidad. Algunas de estas imágenes ilustran parte de lo citado.