• ¡Primer gran tarea: define con precisión tu Propósito principal de vida!

 

  • Todo aquel que se propone una meta y la logra, está iniciando uno de los hábitos más efectivos: ¡Lo que nuestra mente puede crear, en nuestras manos puede estar!

José Ml. Bustos C.

Especialista en Coaching, Mentoring y

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Psicología Industrial

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Expresar los mejores deseos en el Año Nuevo a nuestros seres queridos, compañeros y amigos, debe ir acompañado de consejos prácticos con las formas correctas en que esos anhelos pueden convertirse en realidad.

En esta oportunidad, compartimos una Guía Básica con momentos precisos que pretenden contribuir con facilitar el diseño de una hoja de ruta y con ello, hacer realmente posible el logro de todas las metas que nos planteamos en este inicio del 2023, y con ello, lograr ser feliz plenamente. La felicidad, así como el sentirse exitoso, próspero, en abundancia y hasta la belleza misma, conllevan una decisión consciente; solo hace falta un instante para decidir ser y sentirse como tal. Abordamos entonces un enfoque muy práctico para nuestras vidas que resulta “simple pero no fácil”, ya que requiere una actitud positiva, constante y disciplinada de nuestra parte para emprender este camino hacia la felicidad en el presente año. A este mundo, a esta vida, vinimos a ser felices, y a veces eso tan importante, se nos olvida.

Todo está en conectarnos con nuestro potencial interno y así crecer como mejores personas. “El éxito ama el impulso”.   

  1. Nuestro Porqué. La primera gran tarea es preguntarnos: “¿Cuál es mi propósito de vida? ¿Cuál es esa Misión que me satisface y me realiza? Una vez definido este paso fundamental, todo lo que formulemos posteriormente mediante metas, deben estar conectadas con ese gran legado que deseamos dejar.

2. ¡Soñar! A los “soñadores de ojos abiertos” se les hace más simple esa vía para materializar las metas que se proponen. Por la fuerza de los pensamientos en nuestras mentes, debemos tener claramente definido que todo lo que somos, tenemos o hacemos hoy en día, antes fue visualizado y lo pudimos hacer realidad. De ahí la importancia de soñar con ser más feliz y con ello, mejorar nuestra calidad de vida. Todo lo que nuestra mente puede crear, lo podemos tener en nuestras manos. ¿Desea realizar un viaje exótico? ¿Imagina ya estar allí? La visualización positiva es una poderosa herramienta altamente efectiva que contribuye al logro de todos nuestros propósitos. 

  1. Escribir las Metas. Debemos establecer por escrito “el qué”; lo que voy a hacer, quién quiero ser y lo que quiero tener durante este año que apenas inicia. Al hacerlo así, nos veremos motivados a tomar las acciones necesarias para convertirnos en el tipo de persona que queremos ser. El tener metas escritas, y verlas a diario, nos motiva a querer ser mejor cada día, a mejorar todo lo que hacemos, a hacernos más competentes. ¡Claro que es posible que existan distracciones y caídas, pero eso ya no importa porque el curso está determinado! Asegúrese que la meta no sea demasiado pequeña; escribir y establecer nuestras metas, puede mejorar sustancialmente nuestra productividad. Junto a cada meta, escribe qué nuevos hábitos productivos, vas a poner en práctica.

 

  1. Metas para las distintas áreas de nuestra vida. Establezca esos anhelos para su ámbito personal, profesional, empresarial, financiero, familiar entre otros, y evalúe constantemente tanto las acciones que desarrolla para cada una de esas aéreas, como la calidad de los resultados que vaya logrando.

 

  1. Que las metas sean medibles. Además de muy claras, las metas no pueden tener un carácter genérico, por ejemplo, a veces escuchamos “este año viajaré al extranjero”, la meta debe precisar en qué mes viajaré a “qué lugar”, durante “cuántos” días. Otro ejemplo: algunos dicen, ahorraré…., lo correcto es: cada quincena o mes, separo o deposito determinada cantidad como hábito de ahorro permanente. Igual hemos escuchado, “bajaré de peso”, lo correcto: para tal mes, lograré un peso de al menos “x kilos”, citando la práctica de ciertas rutinas nutricionales o deportivas. Las metas deben ser alcanzables, aunque signifiquen un reto para nuestra disciplina y perseverancia. El “Método SMART” es una herramienta muy útil y práctica para ordenar y así cumplir con cada objetivo que nos tracemos. Las metas deben ser entonces, “específicas”, “medibles”, “alcanzables”, “relevantes” (según el propósito personal), y con “tiempo” preciso para hacerlas realidad. Plantearnos metas nos insta a trabajar con mayor ahínco y enfocarnos mejor en la consecución de nuestros propósitos, nos brinda mucha paz interna y felicidad para poder explotar nuestros talentos y habilidades, que son muchas, pero que algunas estarán ocultas, y han de salir durante el proceso de lograr hacer realidad nuestros sueños.

 

  1. Estrategia para alcanzarlas: En esta parte requerimos disponer de un Plan de Acción conciso y preciso, donde anotamos “el cómo”, y así, las distintas formas de cumplir nuestros propósitos, ejemplos: para el viaje o ampliación de la casa, será mediante la obtención de un préstamo o ahorro acumulado con montos y fechas definidas; si es la práctica del ejercicio o visita a un gimnasio, anotar tres veces por semana, o me matricularé en tal centro académico. Contar con un horario para cada asunto, – tal y como se hace en época de estudio escolar o de secundaria,- ayuda muchísimo para avanzar cada día hacia la consecución de todo lo que nos proponemos.

 

  1. Colocar imágenes. Un ejercicio práctico y entretenido es recortar de periódicos y revistas, ilustraciones relacionadas con las metas propuestas, y pegarlas en un pliego de cartulina azul, así recomendado en neurolingüística. Posteriormente colocamos todas esas fotos e imágenes en un lugar o varios donde siempre las estemos viendo, de manera que se facilite el hecho de mantenernos enfocados en lograr nuestras metas. En ese pliego azul, estarán fotos de aviones, ensaladas, billetes y monedas, títulos académicos, aeropuertos, playas; en fin, todo lo que esté vinculado directamente con esos anhelos formulados desde el inicio del año nuevo. Así podremos también conectar y mantener unidas nuestras creencias con lo que nos hemos propuesto.

 

  1. Construir declaraciones propias nos estimulan aún más, a seguir por la senda de obtener todo cuanto nos proponemos. Podemos escribir frases cortas y tenerlas frente al monitor de la computadora, en el dash del auto y hasta en el ropero, de manera que al verlas, las podamos citar varias veces durante el día. Nuestra autoestima se fortalece y nos mantiene altamente enfocados en las tareas pendientes que nos llevarán a efectivos niveles de motivación y satisfacción.

 

Uno de los detalles importantes es asegurarse que la meta no sea demasiado pequeña; cuando las metas son de ese tamaño, pierden el valor motivacional. Por otra parte, muchos se confunden con la idea de “pensar en grande” y establecen metas que son tan imposibles, que sólo les causan estrés, frustración, o la sensación que nunca lo lograrán. Finalmente, en cuanto a las ventajas de que podamos contar con toda esta planificación de nuestras metas y acciones, es que nos aumenta las probabilidades mayores de éxito, un futuro previsible, y nuestra capacidad para causar un impacto en el mundo con nuestros talentos que son únicos; esto nos permite acumular todas nuestras fuerzas y determinarnos a vivir una vida que a cada uno de nosotros nos corresponde diseñar.

 

Puede estar seguro que, el invertir tiempo y energía mental para establecer metas significativas en cada área de su vida, producirá resultados internos y motivación permanente que se traducirá en una vida más estimulante y feliz. Su vida se orientará más hacia ese ser interno y usted experimentará un sentido de control sobre su destino. Ahora, demuestra de qué estás hecho, organízate y da el primer paso hacia la consecución de tus nuevos hábitos, que te facilitarán lograr tus metas y así seas también mucho más feliz en este 2023.

 

 

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