• Compartir al máximo con seres queridos 
• Nacimiento del “Niño Jesús” inspira a ayudar a otros

Redacción

HOY EN POSITIVO

La Navidad es una fiesta que se celebra en muchos países del mundo, con un punto en común, se conmemora la llegada del niño Jesús, el Cristo para la fe cristiana.

Este nacimiento y las celebraciones actuales, replican el conocido acto de que los Reyes Magos llevaron ofrendas al Niño Dios para honrarle, y hasta posiblemente para solventarle necesidades básicas. Jesús y María, padres de este nuevo infante, estaban fuera del hogar, recibiéndole en un humilde pesebre ubicado en una ciudad lejana.

En las navidades se trata de replicar este gesto de desprendimiento a través de los regalos a los niños y demás seres queridos, así también hay un especial interés por ayudar a otras personas y Costa Rica siempre se ha caracterizado por ser una nación solidaria. El reciente impacto del covid-19, nos ha puesto de nuevo a prueba, y esa solidaridad emerge como uno de los principales valores humanos que nos caracteriza. 

Y ese es el especial deseo, tomar suficiente consciencia de la importancia de dar, amar y compartir, especialmente con la familia y aquellos otros que tienen necesidades materiales y espirituales, esta es la razón de que la Navidad llame a tu puerta.

Compartir brinda alegría 

El acto de compartir hace referencia a disfrutar en común de un recurso o un espacio; en sentido estricto, hace referencia al disfrute simultáneo o uso alternativo de un bien finito. Así es, se trata de gozar conjuntamente con otros, un bien que es escaso, porque se va a acabar, y ahí es donde sucede el milagro, porque el compartir no es dar de lo que sobra, es dar de lo que también es necesario para quien lo está dando, es un gesto de amor desinteresado, porque solo busca el bien del otro compartiendo de lo propio.

Esta es una visión altruista que se puede y estamos llamados a practicar en toda época del año, especialmente cuando, se sabe de la necesidad de alguna persona en particular, empezando por la familia y extendiéndose a todos aquellos que lo ocupan.

¿Quién es el prójimo?

La palabra prójimo viene del latín proximus (más cercano), y proximus está formada por el sufijo –ximus (más como en máximo) y prope (cerca), y en hebreo es er rea que significa literalmente «algo que está enfrente», es decir, el prójimo puede ser cualquiera que esté cerca.

Así sucedió en la historia del Buen Samaritano contada en el evangelio de Lucas, capítulo 10; en esta ocasión se narra sobre un hombre que había sido atacado por ladrones y tirado a un lado del camino; estando ahí, pasó un sacerdote, lo vio y siguió de lado; así mismo, pasó un levita y sucedió lo mismo, hasta que finalmente se le acercó un samaritano quien tuvo misericordia de ese hombre, le curó las heridas, lo llevó a un mesón, lo protegió y hasta pagó para que lo cuidaran mientras él no estaba.

En esta historia no solo se muestra la misericordia de una persona y el ejemplo, sino también ilustra como muchas veces, de personas que se podría esperar, no llega esa ayuda, como fue el caso del sacerdote y el levita que eran grandes maestros de la Ley de Dios y escogidos para eso, pero fue un samaritano, -mal visto en esa época-, quien tuvo la mejor acción y comportamiento.

También habla de que la fe debe mostrarse en las obras y no solo con lo que se dice, no solo saber recitar la palabra de Dios sino también aplicarla, así como lo hizo el samaritano. Así se redefine el concepto de prójimo: el que está más cerca, el que responde al llamado de otro, esos dos son prójimos, sin importar religión o nacionalidad.

Esta Navidad del 2021, está tocando su puerta, brinde su cariño y afecto a quién conoce que necesita de su ayuda, o en caso contrario a quién conoce que pueda ayudarle, en cualquiera de los dos casos, hay que estar con las antenitas muy alertas para no perder ocasión de ayudar o ser ayudado.

Tradiciones asociadas a la Navidad

La Navidad también es un acto cultural, ya que se celebra con diferentes tradiciones de un país a otro, e inclusive dentro de un mismo país pueden cambiar según la región o las tradiciones familiares. En Costa Rica se practican algunas muy conocidas, como las siguientes:

Las Posadas: Son fiestas populares que recuerdan el trayecto de San José y la Virgen María para llegar a Belén; estas celebraciones tienen lugar del 16 al 24 de diciembre.

Alumbrados Navideños: También se han convertido en una muestra de la época navideña en donde las calles, avenidas, plazas, parques, grandes árboles, ríos, lagos o montañas, se transforman en hermosos escenarios para el disfrute de los habitantes del lugar o visitantes.

La Cena de Navidad: Consiste en un banquete familiar a medianoche, en honor al nacimiento de Cristo que tuvo lugar a esa hora.

Los Belenes, Pesebres o Nacimiento navideño: Consisten en la representación del nacimiento de Jesús, mediante una maqueta de Belén y sus alrededores, en la que las figuras principales son el establo en donde nació Jesús, la Sagrada Familia, los animales y los pastores, también los tres Reyes Magos y una estrella con una estela que también suele colocarse en lo alto del árbol de Navidad.

Siempre es tiempo de amar y compartir en familia, pero le invitamos a que lo practiquemos más en esta Navidad, todos a dar, porque aún muchos necesitan de nosotros.